Este sábado los manifestantes tomaron por la fuerza la sede de la Contraloría General del Estado de Ecuador en la capital Quito, donde provocaron destrozos en mobiliario y documentos ante ello el presidente de Ecuador Lenin Moreno dictaminó toque de queda y militarización en la ciudad a partir de las 3: 00 de tarde.
Las movilizaciones en Ecuador, encabezadas principalmente por el movimiento indígena, se han agudizado. Tras más de una semana de protestas que se iniciaron por un paquete de ajustes económicos destinadas a cumplir con el acuerdo alcanzado entre Ecuador y el Fondo Monetario Internacional (FMI), que financió al país con más de 4.000 millones de dólares.
Entre las medidas que han levantado la indignación de la población se encuentra el aumento del precio de los combustibles (que supone una subida del 123 % en el caso del diésel) y un conjunto de reformas laborales y tributarias que la Asamblea Nacional (Parlamento) deberá aprobar.
La Defensoría del Pueblo de Ecuador confirmó el pasado jueves la muerte de cinco personas a causa de las protestas realizadas en el referido país, las cuales se han extendido por ocho días.
Entre los fallecidos está Inocencio Tucumbi, dirigente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE) en la provincia de Cotopaxi, en la sierra central del país.