Las fiestas navideñas son propicias para reuniones familiares, cierres de procesos emocionales, de vida, de trabajos, de compartir buenos momentos en familia y los amigos, de adquirir más compromisos sociales, religiosos, pero has pensado que detrás de todos estos buenos deseos hay una dosis de estrés.
Es en vista de esto que tomes en cuenta algunas recomendaciones para que aprendas a manejarlo, ya que el objetivo principal es llevar una vida tranquila, sabiendo enfrentar los retos.
Por eso que te pareces si primero haces una lista de todas las actividades que deseas realizar. Aquí toma en cuenta los compromisos familiares, laborales fijos, y aquellas actividades extraordinarias propias.
Posterior puedes pasar a organizar una agenda y colocarlas por orden de prioridad todas esas actividades que has propuesto. Esto no dudes aliviará la tensión y te hará tomar las cosas con calma
Si quieres una Navidad más tranquila elabora una lista de todo lo que necesitarás para esa fecha. Ejemplo lugar donde pasarás, el menú de la noche, regalos, si los habrá, entre otros.
También se aconseja que planifiques las compras de los alimentos y de paso dónde comprarás los regalos, claro recuerda regalar de acuerdo a tu presupuesto.
Cuidar de tu salud también es prioritario, por eso no te excedas en las comidas, duerme lo suficiente para estar sana. Toma unos minutos del día y practica 20 respiraciones conscientes, siempre que te estés cómoda.
En caso que entres en una situación estresante puedes, entrar al baño y muévete, abre lo que más puedas la mandíbula y respira con la boca abierta hasta sacar el estrés
No está de más que planifiques con antelación las compras así como organices actividades lúdicas y divertidas para que practiques en familia es estas fechas.
Disfruta y se tolerante contigo mismo, y agradécete por hacer lo mejor y lo que puedes, respetando tus limitaciones humanas.