La historia de Maritza y sus seis hijos ya no será la misma. Hace unos días le avisaron que su esposo, un vigilante de seguridad privada y único soporte económico de su hogar, había fallecido. Un carro lo atropelló. Antier, lo enterraron a él ante el desconsuelo de su familia que ahora ve cómo la vida se ha complicado aún más.
En medio de las paredes de adobe, techo dividido entre tejas, un par de láminas viejas, sin casi pertenencias y una tan sola cama está familia llora amargamente la muerte del esposo y padre.
El diputado electo de Nuevas Ideas por el departamento de San Salvador, Ernesto Castro, fue testigo de las necesidades de esta familia cuando visitó su hogar en el cantón Tecoluco, San Pedro Perulapán, en Cuscatlán.
“Supe de esta tragedia gracias al diputado electo por Cuscatlán Jonathan Hernández y a su equipo, quienes han seguido haciendo trabajo territorial luego del 28F. Quisimos llevarle un poco de paz y esperanza en medio de tanto dolor e incertidumbre”, dijo Castro.
Maritza y sus hijos saludaron a los diputados electos con una sonrisa en medio de tanta tristeza mientras caminaban por el piso de tierra para recibir una cocina, camas, colchones nuevos, mesas, ropa, zapatos y apoyo económico que serán de gran ayuda.
“Estaremos ahí, de cerca, apoyándoles, tratando de que toda su familia salga adelante. No los vamos a dejar solos. Ni a Maritza, ni a sus seis hijos ni a Queco, el perrito de la familia, quien nos acompañó alegre durante nuestra visita”, afirmó Castro.
Castro dijo que siempre llevará en su corazón las palabras con las que se despidió de él y quienes los acompañaron, Maritza: “Gracias, Dios se los va a pagar”.
“Lo que ella no sabe es que somos nosotros los que debemos agradecer a Dios por la oportunidad de servirle al pueblo”, agregó.