Un delivery que fue entrevistado por el diputado de Nuevas Ideas, Christian Guevara, relató como ahora con la seguridad que vive El Salvador puede trabajar y entrar tranquilamente a cualquier colonia para dejar pedidos.
“Tengo cuatro años de ser delivery. Antes era bastante complicado. Había bastante temor”, dijo el trabajador salvadoreño.
En el pasado las pandillas extorsionaban y asesinaban a trabajadores de este rubro. Es más, las grandes empresa de comida rápida evitaban que los repartidores entraran a comunidades que eran asediadas por las pandillas.
“Hoy me siento muy seguro. Muy confiando. Igual mis compañeros sienten la tranquilidad. Antes salíamos y no sabíamos si íbamos a volver, pero lo bueno con todo esto es que vale la pena, ahora trabajamos y andamos con aquella libertad que se siente la seguridad”, relató el repartidor de pizza desde la colonia Los Ángeles, Apopa.
Los habitantes de colonias antes catalogadas como “zonas rojas” por su alto índice de violencia y presencia de pandillas, desde la implementación del régimen de excepción y la guerra contra las pandillas, sus habitantes afirman que en la actualidad estos grupos ilegales no se ven y ya no se cobran las extorsiones.
“La pizza tarda 30 minutos en llegar, pero en la Colonia Los Ángeles de Apopa tardó 30 años porque era una “zona sin cobertura». Con seguridad todo es posible”, dijo el diputado Christian Guevara.