EE.UU. mantiene en alerta máxima a sus Fuerzas Armadas en Oriente Medio desde la noche del lunes, ante posibles ataques de drones iraníes contra objetivos estadounidense, según lo revelaron dos funcionarios del país a CNN.
«Hubo indicios de que necesitábamos monitorear las amenazas«, incluso más de cerca de lo habitual, explicó uno de ellos. Otra fuente indicó que «todas las baterías Patriot y fuerzas en la zona» se encuentran «en alerta máxima» ante una «amenaza de ataque inminente».
La inteligencia estadounidense ha observado cómo en los últimos días el país persa desplaza equipos militares, incluidos drones y misiles balísticos. Asimismo, los funcionarios indicaron que estos movimientos podrían significar que Irán trata de proteger sus armas de un ataque del Pentágono o bien que los colocan en posición de ataque.
Por otro lado, la inteligencia de EE.UU. se mantiene atenta ante posibles ataques específicos contra ubicaciones estadounidenses en Irak, Kuwait, Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos y Jordania. Asimismo, desde Washington este lunes advirtieron a los buques comerciales que operan en Oriene Medio de que «sigue existiendo la posibilidad de una acción iraní contra los intereses marítimos estadounidenses en la región». Por su parte, Teherán ha armado aviones no tripulados con misiles.
La situación en la región se ha vuelto explosiva desde que el pasado jueves un ataque aéreo lanzado por el Pentágono en Bagdad acabara con la vida de 12 personas, entre ellas el general iraní Qassem Soleimani y el líder de Kataib Hezbolá y de las Fuerzas de Movilización Popular, Abu Mahdi al Muhandis.
En respuesta, el presidente del país persa, Hasán Rohaní, aseguró un día después que «Irán y oros países que buscan la libertad en la región vengarán» la muerte de Soleimani, considerado un héroe nacional.
Por su parte, el presidente de EE.UU., Donald Trump, anunció que Washington «ha establecido como objetivo 52 sitios iraníes […] algunos de muy alto nivel y muy importantes para Irán y la cultura iraní», y prometió que «serán golpeados muy rápido y muy duro» si intereses o ciudadanos estadounidenses son atacados por Teherán.