Mauricio Funes, quien sumó este miércoles una nueva orden de captura en su contra, por los cargos de agrupaciones ilícitas e incumplimiento de deberes ahora pretende desviar la atención de la opinión pública haciendo críticas a las acciones impulsadas por el gobierno para proteger la salud de los salvadoreños.
«Hay que preguntarle a este perseguido por la justicia, corruptor del Estado, negociador con criminales y violentador de mujeres, si no entiende que EE. UU. ha incrementado su aviso de riesgo de visita a todos los países de la región, Costa Rica incluida, debido a la pandemia», afirmó Ernesto Castro en reacción a las críticas de Mauricio Funes en relación a las medidas a implementar en el aeropuerto por la emergencia sanitaria.
Mauricio Funes, quien vive en Nicaragua desde 2016, ha rechazado las acusaciones de haber organizado acuerdos de no agresión entre pandillas a cambio de beneficios penitenciarios. Según dijo, su gobierno no negoció con estos grupos criminales. Aunque sí reconoce que facilitó el pacto para que no se siguieran asesinando entre ellos.
Por este mismo caso, David Munguía Payés, exministro de Justicia del gobierno de Funes guarda prisión domiciliar. Esto, luego de que un tribunal le impusiera una fianza de 10.000 dólares en julio por razones humanitarias y de salud.
Funes tiene abiertos otros cinco procesos penales en El Salvador por hechos relacionados con posible corrupción durante su gobierno. En todos ellos se ha declarado inocente.