Fidel Antonio Mendoza con más de 20 años de experiencia en la Corte de Cuentas, durante su entrevista en el proceso que llevó a cabo la Comisión Política de la Asamblea Legislativa compartió sus motivaciones, visión estratégica y perspectivas sobre la institución y su papel en la fiscalización de los recursos públicos.
¿Qué lo motivó a postularse como candidato a Magistrado de la Corte de Cuentas de la República (CCR) y cuál es su visión para el cargo?
Me motiva la vocación de servicio, mis deseos de aportar al país en momentos de importantes cambios, donde El Salvador está consolidando un liderazgo regional y destaca positivamente a nivel mundial.
Mi visión estratégica es establecer una organización líder en la promoción de la transparencia, la integridad y la eficiencia en la gestión de los recursos públicos. Como Organismo de Dirección trabajaríamos para fortalecer la confianza de los ciudadanos en las instituciones gubernamentales y en la rendición de cuentas.
Coméntenos sobre su trayectoria profesional.
A lo largo de mi carrera administrativa de más de 20 años en la Corte de Cuentas he tenido la oportunidad de servir al país desde diferentes cargos y roles, entre ellos, auditor, jefe de equipo, perito financiero en juicios de cuentas y demandas contra el Estado, auditor regional y coordinador de equipo del Consejo Fiscalizador Regional del Sistema de la Integración Centroamericana, Subdirector del Centro de Investigación y Capacitación y actualmente, Subdirector de Aseguramiento de Calidad de Auditoría.
A nivel internacional he impartido conferencias, cursos virtuales y presenciales, he sido mentor y supervisor de equipos de auditoría, así como revisor de aseguramiento de calidad de auditoría en Entidades Fiscalizadoras Superiores como las de España, Taiwán, Brasil, México, Ecuador, Perú, Costa Rica, entre otras.
Como actividad al servicio de la profesión y del país, y por designación ministerial, actualmente formo parte de la Junta Directiva del Consejo de Vigilancia de la Contaduría Pública y Auditoría, donde participo en diversas Comisiones de Trabajo, entre ellas: Prevención de Lavado de Dinero, Ética y Revisión de Práctica Profesional, Educación Continuada, Normas de Auditoría, entre otras.
¿Cómo considera que está experiencia le brinda una ventaja única para asumir el rol de Presidente o Magistrado y liderar la institución?
Sinceramente creo que antes de la experiencia, están los valores morales y éticos que uno trae consigo en cualquier rol de liderazgo y que han sido una guía en mi carrera de más de dos décadas en la Corte de Cuentas.
Además de estos valores fundamentales, mi formación profesional como Licenciado en Contaduría Pública (UES), Maestro en Finanzas (UES), Maestro en Auditoría Financiera (UCA), y con Certificación Mundial en Auditoría de Desempeño (INTOSAI) me ha permitido abordar importantes retos institucionales con confianza. Esta formación no sólo representa conocimiento teórico, sino también un profundo entendimiento de los principios rectores de las auditorías, que son esenciales en esta institución contralora.
Sin embargo, lo que considero me brinda una ventaja única es mi experiencia en la institución misma, no me refiero a los años que han pasado, sino a que he tenido el honor de trabajar en diversos niveles, desde auditor hasta subdirector, lo que me ha permitido comprender a fondo el funcionamiento interno de la Corte de Cuentas, sus falencias y desafíos, así como sus oportunidades.
¿Puede compartir ejemplos específicos de logros o contribuciones pasadas que demuestren su capacidad para impactar positivamente en la fiscalización de los recursos públicos?
He tenido la oportunidad de participar en importantes proyectos institucionales y regionales, como en el proceso de implementación de Normas Internacionales de Entidades Fiscalizadoras Superiores (ISSAI), tanto en la Corte de Cuentas como en diferentes Entidades Contraloras de América Latina, a través de la actualización normativa local, de los programas regionales de auditorías pilotos en auditoría de desempeño, ejerciendo el rol de mentor, supervisor y revisor de aseguramiento de calidad y del Proyecto financiado por el Banco Mundial en la Contraloría General de la República de Nicaragua.
La unidad que tengo a mi cargo ha sido fundamental al posicionar a la Corte de Cuentas como referente a nivel Iberoamericano en la implementación de las actividades de aseguramiento de calidad de auditoría, destacándonos, como pioneros en este campo.
Como perito financiero he participado en procesos de Juicios de Cuentas y demandas contra el Estado, con millonarios resultados a favor del Estado
Adicionalmente he participado en la actualización de contenidos del curso de auditoría que se impartía a los aspirantes a auditor de la Corte de Cuentas, así como he sido parte del panel de facilitadores del mismo.
Siempre me he esforzado en la formación y desarrollo de mi equipo, con el objetivo de potenciar al máximo su capacidad y perfeccionar sus habilidades. Mi mayor satisfacción es ver cómo los integrantes de mi unidad se convierten en líderes por derecho propio, mientras desarrollan un enfoque de rigurosidad técnica en sus argumentaciones. Esta contribución a la Corte de Cuentas me llena de profundo orgullo.
¿Cuáles son las principales áreas en las que considera que la Corte de Cuentas debe enfocarse para promover la transparencia y la rendición de cuentas?
Considerando la importancia de la investigación especializada y en razón de lo dispuesto en el artículo 2 de la Ley de la Corte de Cuentas: “La independencia de la Corte se fundamenta en su carácter técnico…”, se propone designar esta tarea a una unidad élite, que realice investigaciones de mejores prácticas, la innovación en las técnicas de investigación, la preparación de materiales orientativos en temas de auditoría, juicios de cuenta y auditoría interna.
Como parte de una reingeniería operativa y con el objetivo de promover una cultura de trabajo con calidad, se propone la adopción de un esquema de indicadores de desempeño para todo el personal, permitiendo la rendición de cuentas desde el nivel organizacional hasta el nivel individual, diseñando métricas de desempeño que facilitarían la toma de decisiones a los jefes inmediatos, la alta gerencia y al organismo de dirección.
Con su conocimiento profundo de los procedimientos y protocolos internos de la Corte de Cuentas, ¿Cómo piensa utilizar esta experiencia para optimizar los procesos y agilizar la labor de la institución?
La eficiencia en los procesos se ha considerado desde la ejecución de la auditoría (proceso medular) hasta la prestación de servicios de parte de la institución, entre las propuestas están las siguientes:
La implementación de un Sistema de Control y Aseguramiento de Calidad de Auditoría para gestionar los riesgos de errores, fraudes al proceso y malas prácticas, representa una deuda histórica de la Corte, ya que ha sido un requisito normativo desde el año 2004. Implica el diseño de controles y criterios de calidad y la incorporación de la figura del supervisor y servirá para evitar arbitrariedades en el proceso de auditoría.
El rediseño de procesos de manera que estén orientados al usuario, se cumpla con celeridad y bajo los mejores entornos tecnológicos, reduciendo burocracia, procurando la satisfacción de los usuarios, la eficiencia operativa y la adaptación al cambio tecnológico.
¿Cuáles serían los principales retos que afronta actualmente la Corte de Cuentas y cuál es su respuesta a dichos retos?
La reestructuración municipal representa una oportunidad histórica y debe marcar un compromiso de la CCR con la eficiencia operativa y con la ejecución de procesos de fiscalización con estricto rigor técnico, ya que reduce a la mitad el universo de instituciones por auditar, de forma que también se disminuirá el número de auditorías de los Planes Operativos de cada Dirección de Auditoría y por tanto, también disminuirá en igual proporción el número de juicios de cuentas que ingresan a las Cámaras de Primera Instancia. Es decir, no hay excusas para no desarrollar con estricto rigor técnico nuestro trabajo.
Por otra parte, el proceso de reestructuración municipal necesariamente implicará la consolidación de la información financiera y de archivos documentales de los distritos en los registros contables y archivos de la municipalidad que absorbe a estos distritos (ex municipalidades), de manera que, ahora que El Salvador estará constituido por 44 municipios y 262 distritos, se deberán realizar 44 consolidaciones de estados financieros.
En dicho contexto, será necesario realizar 44 exámenes especiales para verificar el correcto proceso de consolidación de estados financieros en dichos municipios, por lo que también hay que garantizar que los archivos de cada una de los 262 distritos queden inventariados y bajo resguardo seguro, a fin de que se garanticen las futuras auditorías a los periodos faltantes.
Otro de los retos importantes, es desarrollar con éxito la reingeniería operativa que deba llevarse a cabo y la adopción de un esquema de indicadores de desempeño para el personal es parte de ella y deberá necesariamente generar también una reingeniería mental en cada servidor público, de manera que yo esperaría que se generen ejercicios reflexivos individuales con planteamientos como: ¡Están midiendo mi desempeño!, ¿Estoy a la altura?, ¿Qué estoy aportando?, ¿Qué más puedo hacer para que mi unidad se destaque?, entre otros.
Su compromiso a largo plazo con la Corte de Cuentas es destacable. ¿Qué objetivos personales aspira a alcanzar a través de su posible elección como magistrado?
Mi compromiso a largo plazo con la Corte de Cuentas es impulsado por un deseo profundo de contribuir al bienestar de nuestra sociedad. Más allá de objetivos personales o simples logros en mi carrera, mi aspiración principal es ver a la Corte de Cuentas funcionando de manera eficiente y técnica. Quiero que esta institución sea un modelo de transparencia y responsabilidad, que deje una impresión positiva en la ciudadanía.
Mi motivación radica en eliminar cualquier percepción negativa que exista sobre la Corte de Cuentas, asegurando que su labor sea vista como una fuerza contra la corrupción y un garante de la integridad en la gestión de los recursos públicos. Mi compromiso es trabajar incansablemente para lograr este objetivo y servir a nuestra sociedad de la mejor manera posible.