Pena máxima de 12 años de cárcel, solicitó la Fiscalía General de la República (FGR) para el expresidente prófugo de la justicia, Mauricio Funes, por el delito de casos especiales de lavado de dinero.
En los alegatos finales, el ministerio público le expuso al Tribunal Quinto de Sentencia de San Salvador Salvador, que durante el juicio le presentó suficiente prueba con la cual acredita que recibió una avioneta por parte del empresario guatemalteco Jaime Ramón Aparicio Mejía a cambio de la adjudicación del proyecto de un puente entre los distritos de San Pablo Tacachico y Nueva Concepción.
La causa penal llegó a su fin casi cuatro años después de judicializada, ya que la Fiscalía acusó a Funes en septiembre de 2020.
El extranjero regaló la aeronave para que también fuera compartida por Miguel Menéndez Avelar, conocido como «Mecafé» quien recibió la pena mínima de ocho años de prisión que establece el artículo 5 de la Ley contra el lavado de dinero.
El ministerio sostuvo en la vista pública que la avioneta fue un regalo que Aparicio Mejía dio a Funes y su amigo Menéndez Avelar, para que le asignaran a su empresa Servicios Calificados de la Construcción, S.A. (Serdelco S.A.). la construcción del puente San Isidro, en el Río Lempa, el cual conecta San Pablo Tacachico, La Libertad con Nueva Concepción, Chalatenango.
La avioneta es una Beechcraft King Air 90-TG ADL que el empresario guatemalteco compró en Miami, Estados Unidos en $1,000,000 con el fin de operarla a través de una empresa en el vecino país.
El puente costó $8.4 millones y se comenzó a construir en el gobierno de Mauricio Funes, pero fue inaugurado por Salvador Sánchez Cerén, el 25 de julio de 2017.