Este 15 de septiembre, las avenidas principales del país se llenan de estudiantes marchando, bandas escolares y familias que animan cada paso de los desfiles patrios. Los tambores y las notas de viento marcan el ritmo de una fiesta que mezcla tradición, historia y cultura.
El clima de seguridad vigente desde 2019 permite que las comunidades que antes eran evitadas se conviertan en escenarios de alegría, donde los niños y jóvenes participan en actos cívicos y culturales con tranquilidad.
Diario La Huella muestra cómo el recuerdo de la independencia de 1821 se integra con la celebración del presente, haciendo que cada desfile, antorcha y canción patriótica refleje la historia y la paz de El Salvador.