A Iván Roselver Alvarado Aguilar, alias «Stampes», agentes de Fuerzas Especiales de la Policía Nacional Civil (PNC), le seguían la pista desde hace varios meses, quien está perfilado como uno de los cabecillas que ordenaba asesinatos y otros crímenes en todo el país.
Según las autoridades, el pandillero ocultaba sus tatuajes, para pasar desapercibido, quien durante semanas se escondió en fincas y zonas rurales de Chalchuapa, Santa Ana.
Este miércoles, los equipos de Inteligencia detectaron su presencia en la 8° avenida norte, de inmediato fue rodeado y capturado. “Este criminal responderá ante la justicia por homicidios, extorsiones, amenazas y robos. El CECOT le espera”, expresó la PNC.
En el marco del Régimen de Excepción, el gobierno del Presidente Nayib Bukele continúa firma la lucha contra estos criminales que durante décadas causaron luto y dolor a los salvadoreños.