El Miércoles de Ceniza es una de las fechas más significativas dentro del calendario litúrgico católico, ya que marca el inicio de la Cuaresma, un período de cuarenta días dedicado a la oración, el ayuno y la penitencia en preparación para la Pascua. En esta jornada, miles de salvadoreños acuden a templos y parroquias para recibir la ceniza en la frente, un símbolo de humildad y conversión que recuerda la fragilidad de la vida y el llamado a la reflexión espiritual.
Esta tradición, cuyos orígenes se remontan a los primeros siglos del cristianismo, fue adoptada formalmente por la Iglesia en el siglo XI. Durante la imposición de cenizas, los sacerdotes pronuncian frases como: «Recuerda que eres polvo y al polvo volverás» o «Conviértete y cree en el Evangelio», reafirmando el compromiso de los fieles con su fe.
En El Salvador, la conmemoración se lleva a cabo en iglesias de todo el país, con misas y actos litúrgicos en los que se resalta el significado de la Cuaresma como un tiempo de renovación espiritual. Además de la imposición de cenizas, la Iglesia católica promueve el ayuno y la abstinencia de carne, prácticas que refuerzan el sentido de penitencia y sacrificio.
El padre Fernando Cuevas, párroco de la Iglesia Nuestra Señora , destacó la importancia de este tiempo litúrgico: «La Cuaresma es una oportunidad para acercarnos a Dios, para reflexionar sobre nuestras acciones y renovar nuestro compromiso con el Evangelio». También exhortó a los fieles a vivir este período con sinceridad: «No se trata solo de recibir la ceniza, sino de hacer un verdadero cambio en nuestras vidas, dejando atrás lo que nos aleja de Dios y fortaleciendo nuestra fe a través de la oración y las buenas obras».
Entre los asistentes, Marta Ramírez, feligrés de San Salvador, expresó que este tiempo es un llamado a la introspección: «Recibir la ceniza me recuerda que debo cambiar y mejorar como persona. Es un momento para pedir perdón y acercarnos más a Dios». Por su parte, José Alvarado, quien acudió con su familia, señaló: «Venir en este día especial nos ayuda a recordar que la fe no es solo de palabra, sino de acciones. Queremos vivir una Cuaresma con propósito».
La celebración del Miércoles de Ceniza marca también el inicio de las actividades previas a la Semana Santa, una de las festividades religiosas más importantes del país. En diversas comunidades, los fieles organizan viacrucis y actos de reflexión que acompañan este tiempo litúrgico, en el que se recuerda la pasión, muerte y resurrección de Jesús.