La Dirección General de Centros Penales (DGCP) encontró más «wilas» con mensajes para atentar contra elementos de la seguridad pública durante las requisas realizadas a las Granjas Penitenciarias de Izalco y Zacatecoluca.
El procedimiento realizado en la Granja Penitenciaria de Izalco dio como resultado el decomiso de 135 manuscritos (wilas), además de armas corto punzantes (punzones) y hasta agua fermentada (chicha).
Mientras que en la Granja de Zacatecoluca, se detectaron 87 wilas, apuntes con números telefónicos y armas corto punzante.
Los procedimientos se enmarcan en el Plan de Control Territorial.
«Somos más los que NO paramos labores para lograr recuperar la Paz y la seguridad de nuestro querido El Salvador», expresó el Director General de Centros Penales, Osiris Luna Meza, en Redes Sociales.
Las «wilas» son una modalidad de comunicación adoptada por los pandilleros para hacer llegar órdenes al exterior la mayoría de ellas poseen mensajes cifrados con ordenes directas de los pandilleros recluidos para «atentar contra los cuerpos de seguridad.
Para ello usan materiales como el plástico y el papel higiénico. En las últimas semanas las autoridades penitenciarias han descubierto que esos mensajes son enviados a través de reos que recobran su libertad o por medio de las visita que reciben.
Por ello atendiendo las órdenes del Presidente de la República, Nayib Bukele las autoridades de segurida han decretado el «estado de emergencia» en las cárceles del país, ante dicha medida, los reos pierden los derechos regulados en la legislación salvadoreña, entre ellos la visita de «familiares» para evitar que los miembros de pandillas recluidos envíen órdenes al exterior; además se implementa el régimen de celdas cerradas 24/7, en el que nadie sale por ningún motivo.
La medida está regulada en el artículo 23 de la Ley Penitenciaria, que faculta a las jefaturas de la Dirección General de Centros Penales (DGCP) a declarar el estado de emergencia.