El fiscal del distrito de Manhattan, Alvin Bragg, ha revelado que el expresidente estadounidense, Donald Trump, fue imputado por «falsificar registros comerciales de Nueva York con el fin de ocultar información perjudicial y actividades ilícitas a los votantes estadounidenses antes y después de las elecciones del 2016».
Durante las elecciones, «Trump y otros emplearon un esquema de ‘atrapar y matar’ para identificar, comprar y enterrar información negativa sobre él e impulsar sus perspectivas electorales», destacó Bragg.
Posteriormente, el exinquilino de la Casa Blanca habría hecho «todo lo posible para ocultar esta conducta, realizando docenas de entradas falsas en los registros comerciales para ocultar la actividad criminal, incluidos los intentos de violar las leyes electorales estatales y federales», subrayó.
«Manhattan alberga el mercado empresarial más importante del país. No podemos permitir que las empresas de Nueva York manipulen sus registros para encubrir conductas delictivas», destacó Bragg. Según describe la Declaración de Hechos, el rastro del dinero viola una de las leyes comerciales básicas y fundamentales de Nueva York. «Hoy mantenemos nuestra solemne responsabilidad de garantizar que todo el mundo sea igual ante la ley», agrega.
Trump, de 76 años, se ha declarado inocente de los 34 cargos que se le imputaron tras comparecer este martes ante la Corte de Nueva York.
Antes de que tuviera lugar la lectura de cargos, el exmandatario había sido puesto bajo arresto y custodia policial. Posteriormente, fue dejado en libertad y abandonó el tribunal sin hacer ninguna declaración.
Una «acusación política»
Tras la comparecencia, Todd Blanche, abogado de Trump, declaró que el expresidente estaba «frustrado» y «molesto». Además, acusó al fiscal del caso de convertir un «asunto completamente político» en una «acusación política».
«No es un buen día […] No espero que esto ocurra en este país. No esperas que esto le ocurra a alguien que fue presidente de Estados Unidos», dijo el letrado. «Vamos a luchar, luchar duro», agregó.
Según la ley de Nueva York, Trump no tendrá que pagar fianza porque está acusado de delitos no violentos. Se prevé que luego de comparecer ante el tribunal, regrese a Florida y haga declaraciones el martes por la noche desde su residencia en Mar-a-Lago.
Se trata de la primera vez en la historia de Estados Unidos que una persona que ocupó el sillón presidencial enfrenta cargos penales. El propio Trump indicó que se trataba de un momento «surrealista». «Dirigiéndome a Manhattan, al Palacio de Justicia. Parece tan surreal – wow, me van a arrestar. No puedo creer que esto esté sucediendo en Estados Unidos», escribió el exmandatario en su red social Truth Social.