José Aparicio Rivas fue condenado a 45 años de cárcel por el homicidio de una persona y el intento de homicidio de otra víctima.
Rivas tuvo una discusión con un adolescente a quien intentó quitarle la vida con un arma de fuego. La madre de la víctima se interpuso y recibió el disparo perdiendo la vida en el momento.
El imputado nuevamente le disparó a la primera víctima hiriéndolo en el cuello y luego de creer que había muerto, huyó del lugar.