Las costas salvadoreñas son un atractivo turístico para la surfista Irlandesa, Ayesha Garvey, no sólo por el clima o por poseer playas como El Tunco y El Sunzal que destacan en comercio y con zonas hoteleras predilectas, sino por que «El Salvador es un bello país», dice.
“El Salvador es un bello país, me encanta el clima cálido, las personas son bellas y amorosas, definitivamente regresaré para hacer surf”, señaló.
El surf se ha convertido en una economía emergente para los países dotados con olas adecuadas para deslizarse sobre ellas. En El Salvador, el negocio alrededor del surf va creciendo cada vez más, es por ello la apuesta del Presidente, Nayib Bukele al proyecto Surf City.
Inversiones públicas como la construcción del nuevo Malecón en el Puerto de La Libertad, la autopista Surf City y el desarrollo en la playa El Tunco, apoyan para que el turista extranjero, principalmente, vuelva su mirada a las playas de este país.