El expresidente de la República, Mauricio Funes Cartagena se estaría dedicando a la venta de artículos de lujo en Nicaragua. Investigaciones periodísticas del vecino país revelan que al exmandatario salvadoreño se le ha visto en la ciudad de Managua portando una maleta llena de joyas para sus clientes, personas allegadas al régimen de Daniel Ortega.
La misma fuente señala que Funes también comercia vehículos que aloja en su residencia en Nicaragua.
«La venta de joyas y vehículos de procedencia desconocida, está al margen de la ley -ya que no tiene empresa establecida ni paga impuesto-«, revela la investigación periodística.
En El Salvador, Mauricio Funes, afronta seis órdenes de captura por delitos relacionados con actos de corrupción durante su gestión al frente del gobierno salvadoreño (2009-2014). Durante los últimos meses Funes Cartagena a participado como invitado en diversos medios de comunicación salvadoreños desde donde insisten en declararse inocente de los delitos que se imputan.
Actualmente, el juzgado Octavo de Paz de San Salvador ha ordenado capturar a Funes por el delito de evasión fiscal en perjuicio de la Hacienda Pública.
La orden de captura se formuló una semana después de que la Fiscalía acusara al exmandatario de no pagar más de $375,000 en impuestos en el período fiscal de 2014.
La Fiscalía empezó a ver irregularidades en los movimientos bancarios de Funes cuando detectó la emisión de varios cheques provenientes de una cuenta bancaria a su nombre, sin justificar la procedencia de los fondos de la misma.
Con esa acusación, Funes sumó la quinta orden de captura por delitos de corrupción.
Está señalado de participar en el «Caso Corruptela», en el cual se procesa a una red de venta de justicia a cambio de dádivas al interior de la Fiscalía General de la República que dirigió Luis Martínez.
La Fiscalía también acusa a Funes de haber sobornado a Luis Martínez para no ser investigado por su participación en la negociación de la tregua entre pandillas y por la divulgación en televisión nacional de un documento protegido por el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos.
De la misma forma, Funes es requerido por la justicia salvadoreña por las anomalías ocurridas en la construcción de la represa El Chaparral. En este caso, al exmandatario se le acusa por peculado, mientras que, a Ada Mitchell Guzmán, su compañera de vida, se le imputa el delito de lavado de dinero.
Asimismo se ha solicitado capturar a Funes para que responda por haber divulgado en televisión el Reporte de Operaciones sospechosas (ROS) que incriminó al expresidente Francisco Flores en el desvío de donativos del gobierno de Taiwán para los afectados de los terremotos de 2001.
Por si fuera poco, la Fiscalía anunció que tiene investigaciones abiertas contra Funes por supuestos pagos de sobornos a diputados para aprobar medidas favorables a su gobierno.